Creo que ya iba siendo hora de entrar en el blog! Ya estaba recibiendo demasiadas recriminaciones por no hacerlo. Pero esta vez no lo voy a demorar, y tengo un buen motivo para ello.
El próximo 8 de Marzo me voy a Sierra Leona (viajo con María) para encontrarnos (por fin en vivo!!!) con Coco y visitar Kamabai y las aldeas de Kakayoh-Kagbonga donde se va a construir la escuela. En alguna otra entrada os iremos contando cómo planteamos este viaje y seguro os iremos dando buena cuenta de él. Pero lo que me lleva a escribir ahora es otra cosa:
Esta tarde han venido a casa a visitarme dos de mis sobrinos, Adrián de 7 años y Andrea que pronto cumplirá 6. Me han entregado esta carta, en la que me cuentan que han juntado el dinero de sus huchas y lo han metido en una que me han entregado, para que se lo pueda dar a quien lo necesite. Y me cuenta Adrían que va a estudiar mucho para arreglar el mundo cuando sea mayor.
Os pongo las fotos de la carta y de la hucha ¡¡que está bien llena!! Como podéis ver, estos peques no son sólo guapos por fuera, sino que también los son por dentro.
Muchas gracias, Adrián y Andrea, porque con personitas como vosotros, podemos pensar un mundo futuro de justicia y de paz.
la generosidad de los niños es la mejor lección alos adultos.
Adrián y Andrea, gracias por ver que en vosotros tenemos el futuro de un mundo mejor…